Los Directores VI

LOS DIRECTORES
Esta nueva serie que presentamos ofrece más de 120 biografías escuetas de directores famosos. Las conceptualizaciones serán mínimas; y las recomendaciones discográficas puramente a criterio de nuestra redacción y haciendo abstracción de la posibilidad de mencionar grabaciones adicionales. Por esta causa, sugerimos investigar cuidadosamente las discografías de cada director para “descubrir” otros registros.



LEO BLECH (1871-1958) nació en Aquisgran y estudió con Humperdinck en Munich y en la Hochschule de Berlín. A pesar de haber sido uno de los inmensos directores de su tiempo, es hoy apenas una mención.¡ Soberana injusticia!
Dirigió en su ciudad natal (1893-1899), en la Opera Alemana de Praga (1899-1906) y en la Opera del Estado de Berlín (1906-1923) en la que cimentó su gran prestigio. Por haber sido nombrado por el Kaiser y por su gran fama con el público no fue perseguido por los nazis, a pesar de ser judío. Estando en gira en Riga en 1937, le dijeron discretamente que no era para su bienestar volver a Berlín, por lo que permaneció activo en dicha ciudad hasta 1941. Hasta 1949 trabajó en Estocolmo, año en que reasumió sus funciones en Berlín, donde se retiró en 1954.
Dirigió el estreno de Electra en 1909 a pedido de Strauss. Fue prolífico compositor. Y realizó muchas grabaciones.
Discografía sugerida: 9ª Sinfonía de Schubert; oberturas de Mozart, Weber y Wagner; colaboraciones con Kreisler; siendo sus fragmentos wagnerianos con Frida Leider y Friedrich Schorr hacen lamentar, por su estilo y perfección, que no haya grabado óperas completas.


ARTUR BODANZKY (1877-1939) es recordado hoy casi exclusivamente por los operómanos que coleccionan los registros en vivo del Metropolitan...
Nació en Viena, fue músico en la Orquesta de la Opera y, ya como director, asistente de Mahler. Posteriormente, entre 1906 y 1912, condujo en Praga y Mannheim, dedicándose al teatro lírico. Estrenó Parsifal en el Covent Garden en 1914. En el Met dirigió entre 1916 y 1931, reflejando el estilo de su mentor, Mahler, pero infligiendo severos cortes a las óperas de Wagner
Discografía sugerida: cualquiera de sus versiones en vivo en el Met.


KARL BÖHM (1894-1983) nació en Austria y estudió leyes y música. Comenzó en el Conservatorio de Graz y prosiguió en el de Viena con Eusebius Mandyczewski, el amanuense de Brahms. Se graduó doctor en leyes en 1919 tras haber recibido heridas y la baja en el ejército en la 1ª Guerra. Comenzó su actividad en la música como apuntador en la Opera de Graz. Nunca estudió formalmente dirección pero fue nombrado en 1920 en la misma ciudad. Muck le escuchó dirigiendo Lohengrin y quedó tan impresionado que ofreció asistirle en el estudio wagneriano. En 1921 y por recomendación de Muck, Bruno Walter lo contrató en la Opera muniquesa. Este director fue una de las máximas influencias que tuvo, especialmente en Mozart. Trabajó con Knappertsbusch y de 1927 a 1931 fue contratado en Darmstadt. 1933 y 1934 lo vieron ocupado en Hamburg y luego, por siete años, sucedió a Fritz Busch en Dresden. En 1928 fue uno de los primeros en dirigir Wozzeck y , desde los años treinta, comenzó su amistad íntima con Strauss. Fue considerado especialista en su obra. Precisamente con óperas straussianas llevó a la orquesta de Dresden al Covent Garden en 1936.
Desnazificado en 1947 retomó sus actividades, básicamente en el triángulo Ámsterdam(Concertgebouw), Berlín(Filarmónica) y Viena. Se convirtió en músico viajero y su reputación creció enormemente. De 1950 a 1954 se encargó de las temporadas alemanas del Colón en Buenos Aires, llegó a Estados Unidos y Japón dirigiendo sus últimos años casi ciego. Sus actuaciones en Bayreuth fueron angulares. Fino en el estilo, de técnica simple pero eficiente, Böhm fue muy versátil. La cantidad de sus discos es realmente impresionante.
Discografía sugerida: las 41 sinfonías de Mozart, ejemplar aporte ; la Tetralogía wagneriana, en vivo en Bayreuth; óperas y poemas de Richard Strauss.

WILLI BOSKOVSKY (1909-1991) fue, al menos desde lo simbólico, un volver a las fuentes: el primer violín, el líder, el concertino como director. Como en tiempos idos cuyo último exponente había sido Johann Strauss y luego, aunque brevemente, Rosé.
Vienés, estudió en su ciudad natal, se destacó como solista y ganó el Premio Kreisler. En 1932 entró en la Filarmónica de Viena y en 1939 Knappertsbusch lo hizo líder. Cultivó enorme y finamente la música de cámara, fundando primero su propio cuarteto y luego el célebre Octeto de Viena. Comenzó a dirigir en 1954 cuando dirigió el primer Concierto de Año Nuevo y dejó su puesto al frente de los violines en 1958. Si bien sus discos de cámara tienen gran autoridad (Sonatas de Mozart con Kraus y Tríos de Mozart con Kraus y Hübner como ejemplos) su nombre ha quedado inmortalizado en discos por su labor como director.
Discografía sugerida: música ligera vienesa; danzas completas de Mozart. Epítome del idiomatismo y del buen gusto.



ADRIAN BOULT (1889-1983), figura consular de los directores británicos, nació en Chester y se graduó allí. Fue a observar a Nikisch a Leipzig y estudió con Max Reger. Volvió a su tierra, dirigió algunos conciertos en Liverpool y fue asistente de Bodanzky en el estreno inglés de Parsifal en 1914. Durante y después de la 1ª Guerra dirigió y enseñó, entre otros a Lambert y Heward. Escribió dos libros sobre dirección y actuó con las mejores orquestas inglesas. Comenzó su labor importante en Birmingham entre 1924 y 1930; ese año fue designado titular de la Orquesta de la BBC de Londres y la convirtió en una de las orquestas más elogiadas por Toscanini, quien la dirigió muchas veces.
La paradoja es que estando en plenitud, en 1950 Boult debió renunciar a la BBC por la edad de retiro de los empleados públicos. ¡Intolerable!
Viajó con su orquesta por toda Europa y, en lo personal, dirigió en los Estados Unidos. A partir de su jubilación se dedicó a dirigir otros conjuntos, siempre con su inconfundible sello personal de disciplina, laboriosidad y nobleza musical.
Discografía sugerida: cualquier obra de todos los compositores ingleses de los que fue el máximo paladín; más decenas de registros como acompañante y otros con ciclos mahlerianos especialmente. Tiene un valor emocional muy especial una serie de registros con la angelical y malograda Kathleen Ferrier.

Sir Adrian Boult con Vaughan Williams y otros.

FRITZ BUSCH (1890-1951) fue, indudablemente, uno de los más grandes directores alemanes de su tiempo; una era, precisamente, con luminarias como Klemperer, Walter, Furtwängler, Strauss, Kleiber, Knappertsbusch, Heger, Böhm, Jochum et al...
Niño prodigio en una familia de músicos, todos los cuales fueron merecidas celebridades, Busch comenzó como pianista y con el tiempo llegó a comandar acabadamente al menos otros siete instrumentos. Fue alumno de Steinbach, comenzó a dirigir en Bad Pyrmont en 1909 y en Riga. Gotha y Aquisgrán fueron sus siguientes destinos. Tras un éxito sensacional en un Festival Reger dirigiendo a la Filarmónica de Berlín (los Busch siempre estuvieron muy cerca de Reger y su obra) se estableció en Stuttgart, para suceder en 1922 a Reiner en la célebre ciudad de Dresden.
En 1933, sin ser judío, chocó con los nazis y, al igual que su familia, emigró. Se asentó solo un año en Buenos Aires (ámbito al que volvió muchas veces y en el que su tarea fue casi fundacional) y pasó a Dinamarca en 1934, su país preferido. Allí entrenó y dirigió a la orquesta de la radio danesa a la que estuvo vinculado hasta su muerte, realizando giras con ella. Trabajó arduamente en Glyndebourne y desde 1941- por cinco años- hizo base en el Teatro Colón. También dirigió en el Met. Se lo asocia a versiones inmarcesibles de óperas alemanas(básicamente Wagner y Strauss) y verdianas. Pero su huella indeleble, en el terreno de la lírica, la marcó como mozartiano y desde Glyndebourne. Rechazó el ofrecimiento de su amigo Toscanini d e sucederle en 1936 en la Sinfo-filarmónica de New York pues tenía otros planes.
Sus ensayos eran metódicos y exigentes; y su estilo, directo, refinado y lleno de pasión.
Discografía sugerida: las óperas de Mozart en Glyndebourne; todo lo que grabó del repertorio orquestal alemán. Para cualquier colección seria.

HAROLD BYRNS (1903-1977), cuyo verdadero nombre era Hans Bernstein fue un muy buen especialista en dirigir las obras de Mahler, Bartok, Berg, Strawinsky, Schoenberg y contemporáneos. Hoy se lo ignora totalmente. Nació en Hannover, estudió con Gieseking en el Conservatorio Stern y fue maestro de coros en la Opera Estatal de Berlín con Blech y Kleiber. A Lübeck llegó como director en 1933, dejando su país por los nazis en 1934.
Fue a Italia y posteriormente a los Estados Unidos donde se nacionalizó. Entre 1948 y 1950 dirigió en Los Angeles su propia orquesta de cámara. Volvió a la patria para dirigir entre 1958 y 1961 la Opera Cómica de Berlín oriental y luego pasó a trabajar en Alemania Federal.
Discografía sugerida: Jeux de Debussy