Herbert von Karajan, de "Wunder" a DIOS, el último de los grandes
El disco, el fonógrafo o como se llame es uno de los milagros del siglo XX que, entre otras cosas - y hablando sólo de los más grandes - nos ha permitido y nos sigue permitiendo gozar de las interpretaciones de varias generaciones de insignes batutas: sus portadores habiendo nacido a mediados del siglo XIX (Toscanini, R. Strauss, F. Schalk); años después , hacia los setenta y ochenta (von Weingartner, Nikisch, Furtwängler, Beecham); y a finales de esa centuria (Monteux, Jochum, Kleiber, Busch, Abendroth, Elmendorff, Klemperer, Krauss, Gui, Coates, Mrawinsky, Mengelberg, Munch, Knappertsbusch, Böhm); así como a los más entroncados en el XX, o cercanos a él (Szell, Reiner, Ormandy, Leinsdorf, Horenstein, von Karajan, Fricsay, Barbirolli, de Sabata, Cantelli, van Beinum). con estas meras citas hemos recorrido los apellidos de, posiblemente, los 33 directores máximos de los dos últimos siglos.
Es lógico que el progreso tecnológico conlleve proliferación de grabaciones. Un ejemplo nos ubica en los dos polos: la primera grabación de la historia de una sinfonía completa, la Quinta de Beethoven (Nikisch, Fil. de Berlín) y cinco ciclos completos de las sinfonías de aquel compositor por un mismo director (von Karajan, Philharmonia y Fil. de Berlin [uno en video]).Cien años tras su nacimiento, su personalidad fuera del podio sigue siendo discutida por entendidos y aficionados pero, en lo que a su legado artístico atañe, hay una cierta unanimidad: fue un grande. Así como es complejo mezclar conductas personales con logros profesionales, es difícil no hacerlo.
Su bautismo como Wunder Karajan (milagro Karajan) sigue siendo sólo un slogan de la prensa. El haber quedado involucrado en las disputas de poder de los poderosos ministros del Tercer Reich, el uno apoyando a Furtwängler y el otro a von Karajan, es un acto miserable que presentó como enemigas a dos inmensas figuras.
Furtwängler, desde entonces, se mantuvo siempre receloso y hostil con relación a von Karajan, en medio de una gran enemistad. El otro mantuvo siempre su admiración por el colega, aunque ocasionalmente hiciera pullas sobre aquel.
Que von Karajan haya sido miembro del NSDAP, como tantos otros, no lo excusa de alegar ignorancia de políticas ominosas y horrendos crímenes contra la humanidad. Lo mismo les pasó a los artistas en la Unión Soviética del asesino de masas Stalin, aunque esté de moda no hablar de ello.
Richard Strauss, por ejemplo, aceptó gustoso su nombramiento a puestos oficiales sólo porque en Alemania se representaban sus óperas más que en cualquier otro sitio (derechos de autor). Seguramente sabía lo que pasaba en su tierra pero prefirió voltear la cabeza. Pero su estatura como músico no puede ser objetada.
El hecho es que, con el fallecimiento de Furtwängler en 1954, nadie se interpuso a que von Karajan fuese nombrado titular vitalicio de las Filarmónicas de Viena y de Berlín, desplazando a otros muy meritorios directores austro-alemanes mayores en edad que él. Mucho puede criticarse su instinto comercial, pero debe reconocerse que, por ejemplo, la orquesta berlinesa decuplicó sus conciertos y grabaciones (y por ende sus ingresos) gracias a él.
Manejó el más extenso repertorio entre todos sus colegas y sigue siendo el director que hizo más grabaciones y videofilmaciones. Por ejemplo, entre centenares de registros sinfónicos y operísticos, deben incluirse las fundamentales sinfonías de Haydn y Mozart y los ciclos completos de Beethoven, Schumann, Mendelssohn, Brahms, Bruckner y Sibelius. Más obras religiosas y lo más renombrado desde el barroco a los modernos vieneses, pasando por el impresionismo, Respighi o Strauss y música ligera.
El jóven Karajan comenzó una promisoria carrera como pianista (hay sólo un registro suyo tocando) pero al escuchar a Toscanini en Viena decidió convertirse en director. Fue diariamente de Ulm a Bayreuth en bicicleta para asistir a los ensayos del Maestro italiano en el Festspielhaus. Allí trazó su objetivo: tener algún día el legendario sonido Furtwängler y poder acercarse lo más posible a todas las virtudes de Toscanini. Sucedió a Busch en Aachen y fue invitado por Walter a Viena. Fue prohibido en 1945 y desnazificado en 1947. Apadrinado por Walter Legge reinició su carrera, ascendiendo hasta su muerte. Sus primeras grabaciones con Legge, Schwarzkopf, Hotter y la Filarmónica de Viena difícilmente puedan igualarse (Novenas de Beethoven y Schubert, Réquiem Alemán de Brahms).
No sorprende que dedicara tanto tiempo en grabaciones a los clásicos ligeros vieneses, en los que se lo escucha eficiente con la Fil. de Berlín e inspiradísimo con la de Viena.
Estudiando su legado diferenciamos diferentes etapas de su quehacer. La batuta jóven y bulliciosa (desde los primeros discos hasta 1945), elegante, refinado, preocupado por la transparencia y el lenguaje directo. El segundo período, su era con la Philharmonia bajo la égide de Legge, casi solamente interesado en el preciosismo sonoro y enmascarndo mucho, por ejemplo, los timbales. Su tercera época, los vinilos, como maestro de la técnica y la infalibilidad de estilo. Y sus años finales, los de la suprema sabiduría, condensando todas sus experiencias anteriores, cultivando visualmente el ego en los films pero nunca dejando de justificar su estatura de coloso de toda época.
Tuvo la técnica perfecta, el oído absoluto y la memoria infalible, Eso más la genialidad. Su sexto sentido musical fue excepcional. Eligió vivir como un autócrata y sigue siendo mítico.
Fallecido en 1990, había hacido el 5 de abril de 1908.
Las ediciones del centenario le permitirán escuchar a este gigante.
5 comentarios:
La síntesis con la que Puck recuerda a von Karajan es impecable. von Karajan visitó la Argentina en 1950 y dirigió la Sinfónica Nacional. Sería interesante saber, si es posible, cuáles fueron los comentarios editados acerca de su actuación en esa oportunidad. Julio Nevoran
tu comentario sobre Karajan es bastante ingenuo, frases como "..Mucho puede criticarse su instinto comercial, pero debe reconocerse que, por ejemplo, la orquesta berlinesa decuplicó sus conciertos y grabaciones (y por ende sus ingresos) gracias a él..." corroboran implícitamente mi opinión.
Tus comentarios referente a su persona son "naive". Si realmente quieres opinar sobre su persona infrmate mejor sobre la situación política de los 50 y 60 en Alemania.
Muchas gracias por tu comentario. El hecho de ser "naïve", si es que éste fuera el caso, no es pecaminoso. Calificar nuestro comentario de ingenuo, y sacando de contexto la frase sobre la Filarmónica de Berlín, no sólo mostrás tu propia ingenuidad sino que desconocés un hecho real. Es muy fácil rotular sin siquiera saber el grado de conocimiento que tenemos de la situación política de Alemania en los años 50 y 60. Es muy típico, cuando se lee a alguien, pensar que se sabe más que el que escribe. En el pecado está la penitencia.
Algunas aclaraciones son necesarias:
yo he "rotulado" en base de lo que has escrito, el "hecho real" no tiene nada que ver con la persona "Karajan" (que es de lo que hablo y espero lo aceptes como argumento..sinó estariás ofreciendo los charts del pop y no la música que ofreces)
si después de leer:
Lee los articulos de:
Klaus Riehle: (referente a la actitud desertora de karajan, su íntima amista y de su esposa con Joseph Goebbel)
Peter Uehling: el libro "Karajan", en Rowohlt 2006, Alemania, que te explica su "carrera" en los primeros años
Misha Aster: "Das Reichorquester und die Berliner Philarmonie", podes leer como Karajan logró
que los amis no lo encarcelaran, a pesar de haber actuado en un concierto a 13 km de un campo de concentración (se dice que en algunas partes del concierto la música no se escuchaba porque a pesar de que los trenes iban a a paso de marcha se escuchaba demasiado el ruido de los judíos deportados en los trenes)
como te dije, si publicás el mismo artículo pues no hay nada para discutir,
PD: esto no tienes que publicarlo si no quieres, no es ese el sentido
PD2: soy alemán judío
PD: felicitaciones por la página, es muy buena
El horror del Holocausto no debe dividir a un alemán judío de un alemán cristiano, que eso es lo que es quien escribió la nota sobre Karajan. Ahora te contesta. Como hijo de la post-guerra, me he sumergido en el estudio profundo del arte europeo entre 1933 y 1945. Por eso me opongo a que se libre de culpa a Alfred Cortot, quien no puso la firma para oponerse al saqueo de la pinacoteca de su colega Arthur Rubinstein. Por eso me opongo a que alemanes bien nacidos como Backhaus hayan debido irse a Suiza perseguidos por la Gestapo por negarse a tocar con Furtwängler en un país ocupado. No ignoro que Furtwängler fue un héroe que evitó muchas muertes y a la vez un patriota que no quiso emigrar. Leyendo la biografía no autorizada de Karajan encontramos hasta el número de su afiliación al NSDAP. Aunque se hubiera afiliado para poder trabajar y por consejo del verdugo Goebbels, su simpatía por el nazismo existió y así siguiendo. Por esa razón hace medio siglo que estudio el arte que producen las personas , independientemente de lo que hayan sido. Y Karajan fue un tremendo director, un gran comerciante, un visionario negociante, con pasado nazi. ¿Acaso dirige peor por haberlo sido? Gracias por tu tolerancia.
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